Mudarse al extranjero: ¿Es una buena idea llevar sus pertenencias durante la pandemia?

Últimas noticas
  • mudanza
    shutterstock
Publicado el 2022-01-14 a las 09:30 por Magdalena Grdanoska
Mudarse al extranjero, al igual que muchas grandes aventuras, también conlleva una gran responsabilidad. Tienes que organizar tu estancia en el nuevo lugar en función de tus necesidades, y las de tus compañeros de viaje si te mudas en pareja o con la familia. Partir no es fácil, ya que significa dejar atrás a tus amigos, tu cultura y algunos de tus objetos queridos. Por eso, es muy importante decidir qué llevar y dejar para tu nueva vida en el extranjero.

¿Debes llevarte o no? Es difícil diferenciar qué cosas necesitas realmente. Mudarse durante una pandemia complica aún más las cosas, ya que el transporte y las fronteras pueden estar temporalmente bloqueados. Por esta razón, lo mejor es hacer una lista de las cosas sin las que tú (y tu familia) no podéis vivir y ver si es posible acortar lo máximo posible. Intenta reducir los objetos pesados y voluminosos para los que haya que organizar una furgoneta (a menos que sean imprescindibles). Antes de mudarte y llevarte tus cosas, considera si tienes el espacio necesario para almacenarlas. Comprueba las posibilidades de trasladarlos dentro de la ciudad en la que piensas vivir. Todo depende de tu futuro lugar de residencia, y si existe la posibilidad de mudarte más veces, considera que siempre tendrás que pensar en la logística que les rodea.

En algunos casos, llevar algunos objetos puede tener un impacto más que práctico, pero sí emocional, que puede ser importante. Mudarse con una familia, por ejemplo, significa planificar con antelación, ya que puede ser un reto crear un hogar lo suficientemente acogedor y cómodo para que sus hijos se apropien de él. Ser padre significa pensar en algo más que en el aspecto simplista de las cosas, y si llevar la cama de su hijo significa que podrá dormir mejor, está bien organizar la mudanza. Considera la posibilidad de pedir a los propietarios la posibilidad de hacer una visita virtual del apartamento para la primera reunión. Podría darte una mejor idea del lugar e incluso ahorrarte un contacto innecesario cuando no lo quieras.

La adaptación cultural no es una tarea fácil, y a veces estar rodeado de los objetos de tu casa puede aliviar el estrés que conlleva. Además, algunas cosas son simplemente difíciles de encontrar. Quizá quieras llevarte tu olla arrocera favorita, tus aparatos de limpieza de buena calidad o incluso tu televisor. Todo depende de tu conexión, pero los objetos, aunque sean poco importantes, pueden cambiar nuestra percepción del entorno que nos rodea y ayudarnos a evitar la llamada "depresión del traslado".

Si el envío es menos conveniente que la sustitución de los objetos que tienes, deberías considerar la posibilidad de comprar otros nuevos. Considera que a veces es más fácil simplemente pedirlos y utilizarlos en el tiempo que necesite, e incluso venderlos de nuevo antes de irse. En muchos países como Alemania se alquilan apartamentos sin electrodomésticos con más frecuencia, y a veces el inquilino anterior vende los muebles al futuro. Siempre puedes plantearte conseguir electrodomésticos de segunda mano o vender los tuyos después. Además, es importante tener en cuenta las normas del propietario, así como las condiciones generales. Comprueba si necesitas un humidificador, un aire acondicionado o algún aparato en particular que ya tengas. Pero recuerda, trae cosas porque las necesitas, no porque sean valiosas, ya que la mudanza podría significar también su deterioro.

La ropa es fácilmente reemplazable, y debes tener en cuenta las temperaturas del lugar al que te mudas. Si vienes de un país más frío a uno más cálido, por ejemplo, traer chaquetas, por muy queridas que sean para ti, sólo podría añadirse al equipaje que tienes. Por supuesto, la ropa tiene a veces un valor sentimental. Sin embargo, intenta ser práctico. Hacer espacio para nuevas cosas en tu vida es algo bueno, y quizás las nuevas signifiquen una nueva aventura. Considera la posibilidad de guardar la ropa vieja, venderla, regalarla a tus amigos o donarla.

Los ordenadores, los gadgets y los equipos de música son objetos importantes que, por lo general, es bueno llevar, ya que muchas empresas han adoptado la opción de trabajar desde casa. Ten cuidado con su transporte y considera hacer una copia de seguridad antes del viaje, por si acaso pierdes algún dato importante. Ten en cuenta que los enchufes eléctricos son diferentes en algunos países y que podrías necesitar un adaptador. Recuerda, sin embargo, que algunos aparatos no duran para siempre, y es mejor descartarlos con el tiempo.

Los documentos y el papeleo son cruciales. Intenta llevar consigo todos los certificados que pueda necesitar y planifica con antelación la obtención de los mismos en tu país antes de trasladarte. Con el cambio de las normas de viaje, nunca se sabe cuándo puede ser difícil viajar de vuelta y recuperarlos cuando más los necesite. No te olvides de conseguir tus documentos legales (y planifica todos los sellos mientras estés en tu país de origen) y tu historial médico, que puede ser necesario en tiempos de Covid y difícil de conseguir una vez que te mudes.

Los medicamentos y las vitaminas son ahora más importantes que nunca. Aunque algunos suplementos básicos están disponibles en todo el mundo, no está de más acumular suministros médicos. Ten en cuenta que algunos países no tienen los mismos productos (pastillas para el dolor de cabeza, bálsamos musculares), y que en muchos es más complicado conseguir algunos medicamentos antes de obtener una receta. Consulta con tu médico en tu país y prepárate de antemano. No olvides comprobar siempre la etiqueta y su fecha de caducidad.

Al planear la mudanza, lo mejor es empezar a hacer una lista desde el principio y discutir con tu familia sus necesidades. ¿Tienes un coche y piensas llevarlo? Evalúa si es lo suficientemente grande y está en buenas condiciones y qué parte del transporte puedes realizar con él. Llevar el coche significa tener más flexibilidad en caso de que se cancelen los vuelos, así como un viaje más seguro que en avión. Además, si tienes que llevar más cosas, busca con la mayor antelación posible empresas de transporte y pídeles presupuestos. Estos pueden depender de la época del año y de la normativa vigente, así que es mejor estar bien preparado para evitar el estrés de la organización de última hora.

Ser expatriado significa tener que llevar siempre su casa consigo, y por ello limitar su tamaño, pero así es como el mundo se convierte en su hogar, y con esta mentalidad, tanto la mudanza al extranjero como el regreso a casa serán más fáciles.