Son muchos los factores que atraen a los expatriados a Asia, como las oportunidades profesionales y empresariales, las culturas vibrantes, el coste de la vida barato en algunos lugares y el fácil acceso a otros países de la región. El coste de la vida, en general, es una preocupación para las personas y las familias que desean vivir en el extranjero.
Mercer ha publicado una clasificación del coste de la vida en 2021 para 209 ciudades, con el fin de ayudar a los empresarios a calcular la remuneración de los empleados expatriados. La clasificación muestra que algunas ciudades asiáticas se están convirtiendo en las más caras para vivir. Ashgabat (Turkmenistán) encabeza la lista como la más cara, seguida de Hong Kong, Beirut (Líbano) y Tokio (Japón). Shanghái (China), Singapur y Pekín (China) ocuparon los puestos sexto, séptimo y noveno, respectivamente. Estas ciudades se sitúan por delante de las ciudades generalmente consideradas caras, como Nueva York y Londres, que ocupan los puestos 14 y 18, respectivamente.
Ashgabat desplazó a Hong Kong, que encabezaba la lista en 2020, al segundo puesto en 2021. Sin embargo, el aumento más notable fue el de Beirut, que subió 42 posiciones año tras año para convertirse en la tercera ciudad más cara en 2021. La razón del aumento de rango de Beirut fue, según el informe de Mercer, "una severa y extensa depresión económica debido a la escalada de varias crisis: la mayor crisis financiera del país, la COVID-19 y la explosión del puerto de Beirut en 2020".
A pesar del aumento del coste de la vida, algunas ciudades asiáticas también están consideradas como algunos de los mejores lugares del mundo para vivir. Por ejemplo, las ciudades japonesas de Osaka y Tokio se encuentran entre las cinco más habitables en el Índice Global de Habitabilidad 2021 de The Economist Intelligence Unit.
Las ciudades más baratas pueden no serlo para todos los expatriados
Entre los destinos populares para expatriados que ocuparon los puestos más bajos en el ranking de ciudades con coste de vida de Mercer 2021 se encuentran Kuala Lumpur (Malasia) en el puesto 152, Ciudad de Ho Chi Minh (Vietnam) en el 143, Hanói (Vietnam) en el 139 y Phnom Penh (Camboya) en el 125. Bishkek (Kirguistán) fue la más barata, con el puesto 209.
Varias ciudades siguen siendo baratas, especialmente para los empleados y empresarios que ganan en monedas más fuertes. Por ejemplo, Mercer observó que Bombay (India), que ocupaba el puesto 78 de las más caras en 2021, bajó 18 puestos de un año a otro debido a la debilidad de la rupia india en comparación con otras ciudades.
Sin embargo, para los expatriados que consiguen trabajos locales y con salarios locales estas ciudades ya no son tan baratas como para los que ganan salarios de expatriados en monedas más fuertes. Por ejemplo, Mercer situó a Colombo (Sri Lanka), conocida como un destino barato en general, en el puesto 185 para empleados internacionales, dentro de las 25 ciudades más asequibles. Pero la ciudad puede no ser barata para algunos residentes de Colombo que ganan sueldos locales.
Mathy Nithianantham, que regresó a Colombo en 2020 después de vivir varios años en el extranjero, declaró: "El mayor gasto en Sri Lanka se produce en forma de alquiler, especialmente en las ciudades. A menos que el expatriado tenga unos ingresos constantes en el extranjero, el alquiler puede convertirse en una carga, porque ganar en el país y pagar el alquiler no es lucrativo. La compra y el alquiler de vehículos son caros, y el sistema de transporte público aún no facilita una movilidad cómoda por todo el país. Sin embargo, los precios de los alimentos son algo razonables, sobre todo para quienes ganan en monedas más fuertes. Las facturas de los servicios públicos, si se gestionan con eficacia, también pueden mantenerse en niveles razonables".
Por lo tanto, cada expatriado debe elegir dónde es asequible en función de sus circunstancias, como por ejemplo si va a trabajar para una empresa extranjera que gana sueldos más altos que sus homólogos locales, los niveles de inflación, las fluctuaciones del tipo de cambio, los presupuestos personales, los planes de inversión, y los requisitos de estilo de vida.
